La preciosa Inés

Me parece mentira que desde que este blog de "júrgol y tetas" empezara su andadura (allá por la primavera de 2006, si no recuerdo mal, con motivo de la despedida de soltero de nuestro querido Mr.X), no hubiera posteado todavía a Inés Sastre entre mis poleitas. Hace unos meses pensé que ella debería ser la que ocupase el puesto en mi despedida del blog, ya solo quedaba contemporizar con la fecha de inserción en función del "privilegio" de obtener la condición de paganini.

Modelo y actriz de éxito, nació un par de años después que nosotros, en el 73. Yo la conocí en 1988, como la mayoría de nuestra generación, flipando al verla en "El Dorado" de Carlos Saura. En realidad fue mi (segundo) amor platónico de la gran pantalla (tras Jennifer Conelly, como una vez os conté en este mismo foro).

También, en mi subconsciente, me da la impresión que a Inés le debo, en un importante porcentaje, mi gusto por los nutricionalmente excelsos big-macs, pero ese episodio quizás debería ser objeto de un estudio algo más profundo por un profesional de la psique.

En 1989 ganó la competición de la agencia de modelos Elite. No obstante, rechazó firmar el contrato ofrecido por parte de dicha agencia, ya que quería terminar sus estudios. Ya se sabe; mens sana... En 1992 empezaba con sus estudios de filología francesa en La Sorbona.

Actualmente reside en París, aunque tiene al menos una "segunda vivienda" en Sotogrande, humilde como la muchacha, que sorprendentemente salió en los paradise papers sacados a la luz por unos rojeras masones.




Aparte del español, habla con fluidez el inglés, el francés y el italiano... lástima que no parle el valensiá, per a tindre una tersera residensia en la safor o en tractòria, al costat de la del honorable i estimat Vicent Marzà.



Su vida sentimental ha sido más rica que la mía ;-) Se le ha relacionado con multitud de famosos, con el denominador común de extensa billetera y cuenta corriente saneada, empezando por el ciudadano Felipe, y siguiendo por Colate Vallejo Nájera, Luis Alfonso de Borbón, Francois Hollande o, el que más me gusta con diferencia, mi querido Colin Montgomery (más conocido como Sra. Doubtfire por el circuito de golf profesional del European Tour). En 2004, con motivo de su affaire con Monty, cuando la muchacha contaba con 31 años y el de Glasgow con 41, ya se le atribuían 11 romances con billonarios en la década precedente. Imagino que habrá seguido con su impecable trayectoria e incrementado las muescas, por lo que apuntan las crónicas, aunque me temo de que con el populacho, a pesar de vivir inmersa en los valores de la revolución francesa, no debe acabar de mezclarse del todo. Como no podía ser de otra forma, hace unos años se casó con un barón (con b), cuyo enlace tan sólo duró un año y medio, lamentablemente: "Cuando un matrimonio acaba es porque se ha acabado lo que le unía: el amor de la pareja", declaró contrariada la modelo. No ha repetido casamiento, hasta el momento.

Pero que queréis que os diga, a mi me sigue gustando igual o más con el devenir del tiempo, como el Château Lafite, a pesar de los kilos y de las imperfecciones que otorgan los años. ¿Sigue teniendo un pedazo de cuerpazo, ahora que es cuarentona, o es que estoy delirando, rebosando testosterona?

Indudablemente es muy bonita, pero sobre todo es que ha sido muy bonita para mi desde hace mucho tiempo, y con el paso del tiempo. Os dejo con dos imágenes bellísimas que reproducen un desnudo para Pirelli, con 21 años de diferencia entre ambas instantáneas.



Me parece una buena poleita para cerrar mi participación en el blog, todo en esta vida tiene un principio y un final. Ha sido un verdadero placer, amigos!